Por
lo general, cuando se quiere pintar un
piso en Zaragoza, suele contemplarse la posibilidad de usar alguno de los
tipos de pintura más habituales: Acrílicos, pintura plástica, al temple… En anteriores
artículos de este blog hemos hecho referencias a algunos de estos tipos de
pinturas, pero hoy queríamos llamar tu atención sobre u tipo de pintura que,
tradicionalmente se ha utilizado principalmente para la pintura de exteriores,
pero que también ofrece unas posibilidades interesantes para el interior de las
viviendas.
Nos referimos a las pinturas a la cal, esa pintura que, tradicionalmente ha
cubierto y cubre tantísimas viviendas y localidades enteras de la costa
mediterránea y del interior del sur peninsular y que tantas ventajas ofrece. La
pintura a la cal ya se utilizaba antes de la llegada de los romanos y sus
propiedades higiénicas son conocidas desde entonces hasta el punto que una
ordenanza real dictada por el rey Carlos III recomendaba el encalado de sus
casas para prevenir la propagación de algunas epidemias.
De hecho, cuando haya que pintar un piso
en Zaragoza
en donde viva alguna persona alérgica, las pinturas a la cal
son una opción a tener muy en cuenta porque evitan la proliferación de dos de
los principales alérgenos: los ácaros y los hongos.
Si piensas que la pintura a la cal sólo puede emplearse para conseguir un tono
blanco impoluto, lamentamos tener que decirte que estás muy equivocado. Hoy en
día existen multitud de tintes para aplicar con esta pintura con los que puedes
obtener cualquiera de los colores del espectro.
Eso sí, para manipular la pintura a la cal es preferible que lo dejes en manos
de los especialistas de Pinturas Y
Pavimentos Belice II
pues debe ser preparada con sumo cuidado.